Instituto de Ciencias Forenses de Puerto Rico

 

PUBLICACIÓN DE REGLAMENTOS

CONVOCATORIAS

Proyecto Forense contra el maltrato infantil

SC-guenos en Facebook

SC-guenos en Youtube

 

Volver a la página principal del Instituto de Ciencias Forenses
Enlaces para Departamentos - Instituto de Ciencias Forenses
 
 
 
 

Olvidados decenas de cadáveres en el Instituto de Ciencias Forenses

SACS 10/7/2010 Arys L. Rodríguez Andino
Primera Hora

El Instituto entierra a más de 100 personas cuyos cuerpos no fueron reclamados.

A pesar de que el Instituto de Ciencias Forenses (ICF) logra identificar a más del 90 por ciento de los cadáveres que llegan como John Doe y Jane Doe, la búsqueda por agilizar el proceso y lograr que sean los familiares  quienes entierren a sus seres queridos llegará a Primera Hora a partir de hoy.

"Hace falta la publicación de esta data en un medio que sea más visitado, más conocido, donde la comunidad de Puerto Rico esté más familiarizada. Entendemos que con este nuevo esfuerzo vamos a aumentar la cantidad de personas que podemos identificar y entregar esos cuerpos a sus familiares, que es nuestra meta última", señaló la directora del ICF, María Conte.

Cada año, el Instituto entierra a más de 100 personas -algunas identificadas- cuyos cuerpos no fueron reclamados durante las dos, tres o hasta cuatro semanas que estuvieron en la agencia, a pesar de los esfuerzos por hallar a algún familiar.

"Yo entiendo que ya a los 15 días, sin un familiar no ha venido a reclamar, en 15 días ya ése entra en una categoría de no reclamado definitivamente. Nosotros tenemos casos donde la gente no viene inmediatamente, no viene el mismo día, pero cuando pasan 15 días probablemente no lo va a procurar", indicó Conte.

Para identificar a los cientos de John Doe que llegan al ICF cada año, una de las primeras cosas que se hacen es tomarle las huellas dactilares a los cadáveres.

"A todos se les toma una huella digital electrónicamente, se escanea y se envía al registro de datos de huellas de la Policía de Puerto Rico y al registro de huellas del FBI; eso permite que en cuestión  de minutos  podamos corroborar la identidad de todas las personas que llegan al Instituto de Ciencias Forenses y que tienen huellas en esos bancos de dato", explicó la patóloga.

Con esta tecnología  muchas veces  el ICF se entera de quién es la persona fallecida antes de que el cuerpo sea reclamado por sus familiares. "Eso se complementa con Mugshot, donde el Instituto tiene acceso a la base de datos de la Policía de Puerto Rico de todas las personas que han sido fichadas desde finales de 2009", amplió Conte.

Para reclamar a algún familiar desaparecido las personas pueden ir al ICF para corroborar si la agencia tiene registrado el nombre de quien se busca. Si no figura en la lista, entonces buscan según los rasgos. Lo complicado es cuando el cadáver están en estado de descomposición y las características físicas no permiten una identificación a simple vista.

"Ahí es que hay que entrar en un proceso de identificación científica, que es lo que se interpreta como que atrasa el proceso",  señaló Conte.

A los cadáveres también se les toma una muestra de ADN que se envía al registro nacional  Codis. Además, se les hace un chart dental.

Si durante este proceso que puede llegar tomar un mes nadie ha reclamado el cuerpo, el ICF se encarga de coordinar el entierro de la persona, identificada o no.

"También por experiencia uno sabe qué caso tiene más probabilidad o menos de ser sujeto a una identificación", aseguró la directora. 

Cuando se han agotado todos los recursos y no se ha podido identificar, los datos   de la persona se registran en Namus antes de que sea enterrada por el ICF. También se  incluyen fotografías, si las hubiera. 

 "En Namus entramos los casos John Doe y Jane Doe; hay tres identificaciones entre los casos", indicó sobre un registro al que puede entrar cualquier persona que tenga acceso a Internet.

Aunque se podría pensar que nadie, a propósito,  dejaría un cuerpo sin reclamar, lo cierto es que ocurre. A veces los  familiares dicen que no tienen dinero para un entierro o que no les interesa hacerse cargo del muerto.

"A veces es que no tienen relación por mucho tiempo. Queremos publicar los datos por si esa familia está interesada en reclamar el cuerpo y ocuparse del entierro", expresó Conte, quien resaltó la importancia de que "sea su familia quien le dé sepultura y complete esa etapa emocional en el proceso de despido".

 

 
 

© 2016 Instituto de Ciencias Forenses de Puerto Rico. Autorizado por la Comisión Estatal de Elecciones-CEE SA-16-6580
ASCLD
FQS
NAME